El atropello masivo ocurrido ayer en Toronto, Canadá, continúa en suspenso, pues las autoridades no han podido establecer una conexión terrorista con el mismo.
El presunto responsable fue detenido e identificado, se trata de un hombre de 25 años de edad, llamado Alek Minassian, a quien no se le han encontrado vínculos con grupos extremistas.
La detención de Minassian fue realizada sin un tiro, pero no exenta de tensión, puesto que el ahora detenido se negaba a cooperar con la Policía.
Incluso amagó con usar un arma de fuego y llegó a decirle al agente policial que lo detuvo que le disparara en la cabeza.
Por su parte, Ralph Goodale, ministro de Seguridad Pública de Canadá, que calificó el catalogó el hecho como un «ataque horroroso», aunque puntualizó que «no tiene una conexión particular con la seguridad nacional».
En tanto que Mark Saunders, jefe de Policía de Toronto, no quiso descartar la posibilidad de que el atropello se trate de un ataque terrorista, mientras que no se termine la investigación.
Hay otra línea de investigación que se ha ventilado, relacionada con posibles problemas psiquiátricos de Minassian, aunque las autoridades no se han pronunciado al respecto.