En su visita a Perú el Papa Francisco pidió mayor compromiso y transparencia en el sector público y privado de toda Latinoamérica, con el fin de evitar la corrupción, a la que calificó de virus social que daña los cimientos de la democracia en la región.
Este llamado se da después de que el Presidente peruano Pedro Pablo Kuczynski diera un indulto humanitario polémico al ex Mandatario Alberto Fujimori, que se encontraba encarcelado por abusos a los derechos humanos y corrupción.
En el discurso del Sumo Pontífice, frente a autoridades políticas, diplomáticos y líderes de la sociedad civil en el Palacio de Gobierno de Lima, afirmó que la lucha contra la corrupción es vital y que los más perjudicados son los pobres.
«Lo que se haga para luchar contra este flagelo social merece la mayor de las ponderaciones y ayudas (…) y esta lucha nos compete a todos», dijo el líder de la Iglesia Católica.
Aunque el Papa ya lo ha mencionado antes, llama la atención que lo haga en un evento donde el presidente Kuczynski está presente, por el escándalo en el que estuvo recientemente involucrado.
En los últimos meses varios países latinoamericanos se han visto envueltos en escándalos de corrupción con la empresa constructora brasileña Odebrecht, que ha admitido sobornos a cambio de ganar obras públicas en toda la región.
«Cuánto mal le hace a nuestros pueblos latinoamericanos y a las democracias de este bendito continente ese virus social, un fenómeno que lo infecta todo, siendo los pobres y la madre tierra los más perjudicados», afirmó el religioso argentino.
El tema de Odebrecht ha involucrado a cuatro Gobiernos, entre los que se encuentra el del Mandatario peruano, quien en diciembre evitó ser destituido por el Congreso, quienes lo acusaron de tener lazos con la firma brasileña.
La mayoría de los ciudadanos cree que Kuczynski, un ex banquero, evitó su destitución luego de una negociación política con un bloque del partido de los hijos de Fujimori, a quien se le otorgó el indulto en vísperas de la Navidad por razones médicas.
El Papa Francisco no se refirió al indulto y tampoco accedió a reunirse con familias de las víctimas de abusos durante el Gobierno de Fujimori (1990 y 2000).