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Tras casi seis décadas de actividad, el grupo terrorista Euskadi Ta Askatasuna (ETA) anunció su disolución y pidió perdón a todas las víctimas.
A través de una declaración solemne publicada en los diarios Gara y Berria, el grupo expresó su arrepentimiento.
“ETA quiere reconocer mediante esta declaración el daño que ha causado en el transcurso de su trayectoria armada, así como mostrar su compromiso con la superación definitiva de las consecuencias del conflicto y con la no repetición”, señaló el grupo.
Este posicionamiento se dio luego de que este miércoles anunciaran el cese de actividad y el fin del grupo, pactado para la primera semana de mayo.
“Lo sentimos de veras”, recalcaron en la declaratoria, indicando que era necesario mostrar “empatía respecto al sufrimiento originado”.
Sobre los atentados, secuestros y demás acciones, ETA declaró que “nada de todo ello debió producirse jamás o que no debió prolongarse tanto en el tiempo”.
“Queremos mostrar respeto a los muertos, los heridos y las víctimas que han causado las acciones de ETA en la medida que han resultado damnificados por el conflicto.
“Estas palabras no solucionarán lo sucedido, ni mitigarán tanto dolor. Lo decimos con respeto, sin querer provocar de nuevo aflicción alguna”, asentaron en el documento.
También exigieron que quienes hayan efectuado acciones violentas en España lo reconozcan, pues aún continúan algunas acciones subversivas.
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