Este día sesionará, de manera extraordinaria, la Organización de Estados Americanos (OEA) para tratar exclusivamente la crisis política, económica y humanitaria que se vive en Venezuela.
La reunión se realizará en la sede del organismo continental en Washington y fue solicitada por las representaciones de Brasil, Canadá, Argentina, Chile, Costa Rica, Guatemala, Estados Unidos, México, Paraguay, Honduras, Perú y Panamá.
La representación de Venezuela ante la OEA protestó contra esta sesión, al señalar que lo que se busca con ella es “la desestabilización del país los días previos a las elecciones presidenciales del 20 de mayo, y de esa manera hundir a nuestra nación en una ola de violencia que deslegitime los resultados del voto popular».
Calificando la sesión como una «grave agresión injerencista», el gobierno venezolano expresó que los países que forman parte del Consejo Permanente sufren de “ceguera selectiva”, pues hay otras problemáticas en el continente, pero se centran en Venezuela.
Hay que recordar que en la última Asamblea General de la OEA, efectuada en México en abril del año pasado, no se pudo lograr una declaración sobre la problemática de Venezuela.
Esto motivó que Maduro iniciará el proceso de salida de este país del organismo continental, el cual se podrá finalizar en abril de 2019.