La magnitud de la problemática económica en Venezuela no la recienten sólo los ciudadanos, sino también las mascotas de los venezolanos.
Desde que la crisis económica y social se ha agudizado ha aumentado el índice de abandono de mascotas en este país.
Al respecto señala Moisés González, miembro de la fundación Red de Apoyo Canino (RAC), que las solicitudes de apoyo por parte de dueños de mascotas se han disparado en un 100 por ciento en los últimos dos años.
«Piden ayuda porque ya no pueden encargarse de sus mascotas, sea porque se van del país o porque carecen de recursos para atenderlas, incluida la alimentación», explicó González.
La problemática es compleja, pues es difícil pagar no sólo la comida de los animales, sino también sus medicamentos o atención veterinaria.
Incluso a veces es difícil conseguir la medicina para las mascotas, pues suele haber desabasto.
Para darse una idea de esto hay que mencionar que una consulta veterinaria puede constar entre 60 mil y 940 mil bolívares, lo que equivale al 10 por ciento y 1.17 veces el salario mínimo mensual (el cual se ubica en los 798 mil bolívares).
La aplicación de una vacuna antirrábica cuesta entre 400 mil y 580 mil bolívares, es decir, entre el 50 y 75 por ciento del salario mínimo mensual.
Un kilogramo de comida para perro puede constar de 95 mil a 300 mil bolívares, entre el 11 y 40 por ciento del salario mínimo mensual.