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Señalamientos de corrupción y de una posible de red de prostitución han llevado a la suspensión indefinida del certamen Miss Venezuela.
A través de un comunicado, la empresa organizadora del concurso, Grupo Cisneros Media, informó que la decisión se tomó para «iniciar una revisión interna para determinar si algunos de sus relacionados, durante el curso de sus gestiones, ha incurrido en actividades que quebranten los valores y la ética del certamen”.
El escándalo ha aumentado, luego de que entre varias exconcursantes se han lanzado acusaciones de ser «acompañantes» o «escorts» de funcionarios allegados al pasado régimen de Chávez y al actual de Maduro.
Incluso, algunas de estas exconcursantes han estado vinculadas a casos de blanqueo de capitales y de corrupción.
El escándalo aumentó cuando Annarela Bono, exesposa de Antonio Morales (exedecán del presidente Hugo Chávez y director de un banco público), y Hannely Quintero han señalado a varias antiguas compañeras por ser “enchufadas” o patrocinadas por empresarios o funcionarios del Gobierno.
Tras estas declaraciones la empresa organizadora negó las acusaciones, hasta que finalmente decidió suspender el concurso para investigar el caso.
“Los venezolanos pueden estar seguros que la Organización no dudará en tomar las medidas que resulten necesarias para asegurar que dentro, y durante las actividades que le son propias, no se cometan actos contrarios a las normas, valores y principios morales y éticos”, se indica en el comunicado.
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