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El crimen ocurrido en una sucursal de Waffle House en Tennessee continúa siendo un misterio. El detenido es Travis Reinking, un joven del cual se sabe poco aún.
Un hecho trascendente sobre él es que fue detenido por el Servicio Secreto de Estados Unidos, por haber ingresado a un área restringida cercana de la Casa Blanca.
Este hecho ocurrió en julio de 2017 y tras ser liberado fue entrevistado por el FBI, en Illinois, ciudad en la que vivía en ese entonces el hoy asesino.
Después de ese incidente, a Reinking le fue cancelado el permiso para portar armas de fuego y se le decomisaron cuatro de ellas.
Pero como el hecho no representó ninguna amenaza y su comportamiento nunca fue violento, sólo se le dieron 32 horas de trabajo comunitario y le devolvieron a su padre las armas, quien a su vez se las regresó a su hijo, entre ellas la utilizada en la masacre del domingo: un rifle AR-15.
En 2017 se mudó a Nashville y estuvo trabajando en labores de construcción, presentando inestabilidad laboral.
El crimen
De acuerdo con los reportes policiales, Reinking llegó al estacionamiento del restaurante el domingo por la madrugada y se quedó dentro de su camioneta por varios minutos.
Después bajó de su vehículo, rifle en mano, vistiendo sólo un suéter verde (sin nada debajo de la cintura) y comenzó a disparar a personas que estaban en la puerta del lugar, matando a dos de ellas en el acto.
Luego ingresó al restaurante y continuó disparando, matando a dos más, hasta que un cliente logró desarmarlo, aunque el agresor salió huyendo.
Aún no se ha podido establecer el objetivo del ataque o la motivación del mismo. Reinking continúa prófugo.
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