La presión ciudadana de Nicaragua surtió efecto: el presidente de ese país, Daniel Ortega, anunció este domingo la revocación de la orden de modificar el sistema de Seguridad Social.
El mandatario había propuesto el aumento de los pagos de cuotas para seguridad social, tanto a empleados (del 6.25 al 7 por ciento) como a los patrones (19 al 22.5 por ciento), además de quitar el 5 por ciento de la pensión a los jubilados.
Esta medida, según el propio Ortega, buscaba sanear las finanzas del sistema de seguridad social.
Desde el primer momento la población rechazó la medida y salió a las calles a protestar.
Las protestas se volvieron violentas ante la actuación de la Policía, registrándose al momento 25 personas muertas y decenas de heridos.
Se espera que con la revocación de esta medida vuelva la calma al país centroamericano.